EL TRABAJO BIEN HECHO

VIDRIOS SHEBEKE

El monumento más destacado y valioso del siglo XVIII en Azerbaiyán es el Palacio de Sheki Khans. Fue construido en 1752-1762 como la residencia de verano de Hussein-khan Mushtad, nieto del gran Gadzhi Chelebi. El singular palacio de dos pisos cuenta con un magnífico interior y exterior. La fachada del palacio está ricamente pintada con dibujos que muestran escenas de caza y guerra, así como intrincados diseños geométricos y vegetales. En el centro hay una enorme vidriera de vidrio de varios colores (se usaron hasta 5,000 piezas de vidrio en cada ventana cuadrada). 

El material básico para la construcción del palacio fue ladrillos en bruto, piedras de río, plátanos y robles. Lo más sorprendente es que no se usó ni un solo clavo ni pegamento para la construcción. Todo está en su lugar debido a la artesanía especial, cuyo secreto se perdió y ahora está siendo devuelto a la vida por los artesanos locales. De hecho, el palacio tardó diez años en construirse: dos años en construir el edificio básico y ocho años en hacer todas las decoraciones.
Estos vidrios me hacen pensar en la importancia del trabajo bien hecho, como es el trabajo artesanal. Un trabajo elaborado con sofisticación y tiempo, culminando en un trabajo duradero, delicado y bello.

Esta comprobado que algo bien hecho es duradero y tengo varios ejemplos para respaldar mi teoría, como: : el Partenón en Grecia, las pirámides de Egipto e infinidad de monumentos de la arquitectura clásica. Pero ¿Por que nuestros objetos y construcciones modernos no tienen ese aguante?    

Es sencillo, hoy en día queremos cosas fáciles, rápidas, sencillas y útiles. A su vez tampoco tenemos el mismo valor o aprecio por las cosas, nos cansamos fácilmente de todo. Es una pena.

Está actitud se fue promoviendo durante la revolución industrial, los productores pensaron que si realizaban un producto de calidad para la venta los consumidores solo comprarían un objeto y les duraría toda la vida, por ello decidieron realizar objetos de peor calidad para asegurarse un consumo constante y más dinero.  Es lo que nos pasa hoy en día con los objetos que usamos todos los días el móvil, la ropa, las medias, electrodoméstico...etc. Debemos cambiarlos en plazos de 2 a 10 años como máximo. ¿Hasta cuando vamos a permitir que todo se vaya degenerando cada vez más?

Me refiero a nuestros hogares, cuando nos compramos una casa queremos que ese espacio sea para siempre y de calidad.

Muchas de las empresas actuales incluso profesionales de gremios no son capaces de ver la importancia de construir una casa de calidad, en muchos de ellos es prioritario la compra de materiales más baratos y de peor calidad por llevarse una mayor comisión. Este hecho es denunciado por muchos profesionales ya que para ellos lo realmente importante es el trabajo bien hecho y que sus obras y diseños prevalezcan en el tiempo. Este hecho ha hecho mucho daño a este sector ya que un buen profesional no puede encontrar a trabajadores que realicen su trabajo con una calidad tan buena como si para ellos mismos se tratara, lo que produce que muchos profesionales se nieguen a trabajar en estas circunstancias y no desarrollen sus proyectos por esta falta de actitud.

Por eso quiero remarcar la importancia del trabajo bien hecho para todos los sectores y productos. Elaborar un buen proyecto o producto implica trabajo y dedicación pero sobretodo pasión, cuando te apasiona algo no es un esfuerzo hacerlo.